La palabra oportunidad puede aplicarse a numerosos contextos y es algo que a menudo deseamos tener en varias situaciones que la vida nos ofrece. Algunas personas parecen estar en el sitio correcto en el momento oportuno, mientras que otras tienen un don para verlas venir. Y luego está la actitud que preconizó el humorista estadounidense Milton Berle con la frase «Si la oportunidad no llama, construye una puerta», que sugiere que cada uno de nosotros depende —hasta cierto punto— la creación de nuevas oportunidades. Aunque puede que Winston Churchill atinará más al afirmar que «un pesimista ve la dificultad en cada oportunidad, mientras que un optimista ve una oportunidad en cada dificultad».

Al margen de cómo creas que surgen o se aprovechen las oportunidades, no hay duda de que forman parte de nuestras vidas. ¿Qué opciones tengo al alcance para ser mejor? ¿Qué puedo hacer para aprovechar cualquier posible cambio en el futuro? ¿Con quién debería hablar para avanzar o aprender más? Estas son tan solo tres de las posibles preguntas que podrías hacerte.

Cuando te dedicas a la organización de eventos tienes que estar siempre atento a las oportunidades que puedan surgir, sobre todo con el fin de lograr que las reuniones sean un éxito redondo. Tal vez aquel ponente que creías perdido por aceptar otro evento esté ahora disponible. O tal vez exista un proveedor de catering en la región que ofrezca exactamente el tipo de productos locales que estabas deseando encontrar. Si no estás al tanto y no te enteras de lo que pasa, estas oportunidades pueden pasar de largo.

Otro revulsivo puede ser que algo salga mal ya en la fase de planificación. ¡Qué le vamos a hacer si el lugar perfecto donde tenías pensado hacer el evento ya no está disponible para esa fecha concreta! Quédate con esos elementos que tanto te gustaban del sitio y busca formas de recrearlos consiguiendo el mismo efecto a través de una coordinación eficiente con otros lugares para celebración de eventos profesionales que sí estén disponibles. ¿Qué haces si contabas con un cielo despejado y soleado y aparecen nubarrones amenazantes? Pues no agobiarte y sacar esos paraguas, botas e impermeables personalizados con el nombre de la marca y divertirte bajo la lluvia. La clave está en centrar la energía en el problema y estar al acecho de las oportunidades que se presenten. A menudo los resultados pueden ser incluso aún más positivos.

A veces se te presentará una buena oportunidad sin más; otras, tendrás tú que ir a buscarla. Eso sí, ¡intenta que no te pasen de largo!

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