Alrededor de 1795 la Puerta de Brandeburgo fue coronada con una escultura compuesta de una carroza con cuatro caballos tirada por la diosa de la Victoria en cobre. La que se puede ver ahora, sin embargo, es una copia realizada en 1969, ya que la original se destruyó en la Segunda Guerra Mundial. Tras la construcción del muro de Berlín, la Puerta de Brandeburgo quedó perdida y dividida en medio del este y oeste en tierra de nadie. Tras la caída del famoso muro la puerta volvió a recuperar su esplendor de antaño. Para llegar, puedes coger el tren (S-Bahn) 1 o 2 y parar en Unter den Linden o el autobús número 100 con parada en la Puerta.