Más allá de las páginas de los libros de historia
La Grand Place, es un lugar encantador. El Ayuntamiento, el Hotel de Ville son ejemplo de la majestuosa arquitectura que se puede disfrutar por fuera y por dentro. El estilo Gótico de sus fachadas atrae la atención de propios y extraños. En su interior, esculturas, tapices y lienzos adornan sus muros. Las leyendas que te cuentan en cada visita guiada cobran vida durante el recorrido de las mismas.
Muchos de los edificios que se pueden encontrar en la Grand Place han sido destinados en servicio de las administraciones públicas, utilizados desde sus comienzos por profesionales en virtud de transmitir el conocimiento y maestría a las generaciones futuras. Reconocibles por los detalles en oro de sus fachadas. Justo enfrente del Ayuntamiento, otro edificio capta nuestra atención. La Casa de Pan o Broodhuis que hoy alberga el Museo de la Ciudad de Bruselas.