Llanuras africanas en el centro de Fráncfort
Empecemos por el zoo de Fráncfort. Es un de los más antiguos del mundo, se encuentra en pleno centro de la ciudad a solo cinco minutos en taxi del hotel y sus espacios verdes albergan a más de 4.500 animales de unas 500 especies. A la gente le encanta la jungla de los felinos con sus tigres de Sumatra y los leones indios, entre otros. Aunque estos animales tan nobles suelen verse encerrados con barrotes de metal, la seguridad de los visitantes está garantizada con fosos o paneles de cristal transparentes para que puedan contemplar sin impedimentos a estas poderosas criaturas. El reino animal cuenta con una gran variedad de habitantes que hacen vida nocturna. Por suerte para ellos, el zoo de Fráncfort les ha construido un hogar nocturno especial, el más grande de Europa. Murciélagos, cerdos hormigueros y otros amigos van a lo suyo mientras los niños se asombran a medida que observan y aprenden.
Los monos suelen llevarse el premio al entretenimiento y los de este zoo no se quedan cortos. De hecho, el zoo de Fráncfort fue el primero en criar los cuatro tipos de variedades de primates. Gorilas, chimpancés, orangutanes y otras especies viven en un edificio a medida que imita el entorno natural de una jungla. Con ellos te divertirás un buen rato. También encontrarás galerías de aves, zonas de insectos y reptiles, así como cocodrilos, jirafas y rinocerontes que te acompañarán a medida que avanza tu aventura.
Si ver a los animales te parece poco, tienes puntos para interactuar con ellos, zonas de juego, un espacio para montar en poni y un montón de sitios más para recargar las pilas y beber algo. La palabra aburrimiento se escucha muy poco en este parque.