Durante la ocupación turca de Budapest, el castillo se amplió y remodeló, y se añadieron detalles estéticos que se mantienen a día de hoy. Los arquitectos Miklós Ybl y Alajos Hauszmann aportaron los elementos secesionistas del edificio.
Por supuesto, no sería un castillo de verdad si en él no se representaran escenas históricas. En la fachada del castillo encontramos varias, por ejemplo, en la puerta de Corvino, fácil de reconocer si vas paseando desde Dísz tér hasta Szent Gyorgy utca o Szíház utca, por el cuervo que sostiene un anillo de oro con el pico.
El punto de encuentro principal de los oficiales más veteranos del castillo donde reunirse y despejarse se bautizó como el Patio de los Leones. A día de hoy, está rodeado de los museos que alberga el castillo.
En el patio noroeste del Palacio Real encontrarás la Fuente del rey Matías, dedicada al gran rey renacentista Matías Corvinus. Cuenta con una figura decorada que representa una escena de caza con otra estatua en la que el rey aparece rodeado de un gran grupo de ayudantes y sirvientes. Se trata de una obra maestra de la arquitectura que refleja el paso del tiempo y es una muestra de diversos estilos arquitectónicos, desde el gótico hasta el barroco y el renacentista.
Castle Hill de Budapest es un lugar único si tenemos en cuenta su interior y exterior, su historia, todos los acontecimientos que allí han sucedido, numerosos reinados e imperios en sus buenos y malos tiempos, épocas doradas, guerras y siglos pasados. Se trata, sin duda alguna, de un monumento único en el mundo junto con otros que mencionamos más adelante.
Cuando lo visites y hagas la ruta guiada, te contarán muchos detalles sobre este palacio, desde su historia hasta su arquitectura, pero en una parte del recorrido descubrirás dos espacios donde la historia y el arte están más presentes de lo que parece a primera vista.
Además de ser el hogar de reyes y gobernantes de la región en épocas pasadas, la Castle Hill es, actualmente, sede del Museo de Historia de Budapest y la Galería Nacional de Hungría, dos lugares históricos que nos ponen en contexto sobre lo que sería vivir en este sitio mágico. Por estas razones y otras que mencionaremos más adelante, ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
De momento, parecería que la Castle Hill y su interior fueran los únicos sitios interesantes de la zona pero, como dijimos al principio, fuera del castillo hay lugares tan peculiares e importantes como el Bastión de los Pescadores, la iglesia de Matías y el Laberinto. Son sitios para explorar aún más en tu visita a la capital húngara.
Si pensabas que el castillo no podría ofrecerte nada más, te equivocas: allí también se celebran festivales y eventos muy populares en la zona. Los tres principales son el Festival Medieval y del Renacimiento en el Palacio real de Buda, el Festival de artes populares del barrio del Castillo de Budapest y el Festival del vino de Budapest.
Estos eventos te permitirán saber más sobre la cultura de este lugar y relacionarte con gente de la zona, por supuesto, siempre que tengas un buen nivel de húngaro, aunque si hablas bien inglés no tendrás ningún problema.