Dom de Hamburgo: cerveza, salchichas y cultura

Hamburgo posee muchos atractivos para visitarla en cualquier época del año. Pero si haces coincidir tu estancia con la feria del Dom de Hamburgo no te arrepentirás. Dura un mes y se celebra tres veces al año: a principios de primavera, verano e invierno.

Ricardo Carvalho

El Dom de Hamburgo

La feria Dom de Hamburgo se celebra en uno de los barrios más conocidos de la ciudad, sobretodo por su vida nocturna: St. Pauli. En medio, en un enorme recinto, se instalan tres veces al año puestos de comida y bebida, escenarios y atracciones para que, durante un mes, alemanes y visitantes puedan disfrutar de esta conocida feria, equiparable a la Oktoberfest de Múnich. 

En el recinto, conocido como Heiligengeistfeld, encontrarás de todo: atracciones como la noria de Hamburgo, ruedas para poner a prueba tu fortuna, montañas rusas y todo tipo de espectáculos musicales. 

Abre cada día de 15 a 23 horas, hasta las 12 de la noche los viernes y sábados. Todos los viernes, a partir de las 22.30 horas se organizan los esperados fuegos artificiales. El festival Dom de Hamburgo se celebra tres veces al año. Las fechas varían y las puedes consultar aquí. En general, la ciudad acoge el Dom de primavera entre marzo y abril, el Dom de Hamburgo en verano en agosto y el Dom de invierno de mediados de noviembre a mediados de diciembre. Los organizadores varían la oferta de diversión en cada edición y cada año es distinta.

Actividades para todas las edades

En la feria del Dom de Hamburgo hay espectáculos y actividades que siempre se pueden realizar. En primavera se realizan los torneos de caballeros delante de una enorme recreación de una torre medieval. En verano, aparte de un impresionante y mágico tour por la aldea de las brujas, se realiza un espectáculo de cowboys, en el que se recrea una ciudad al más puro estilo de las películas del oeste. En invierno, el carnaval medieval inunda las calles. Los participantes que deseen participar en el evento salen disfrazados con un traje típico y original de esta época y desfilan por las calles en una divertida cabalgata medieval. 

Y es que el festival tiene un origen medieval. El Dom de Hamburgo lo empezaron un grupo de comerciantes y todo tipo de feriantes organizando una feria que tuvo mucho éxito y que ha llegado hasta hoy.

Comer y beber en el Dom de Hamburgo

En todas las ediciones podrás degustar la cerveza alemana, que se vende en muchos de los puestos que se instalan en el Dom de Hamburgo. Pero también te la puedes tomar sentado en una impresionante terraza que recrea, gracias a su arena artificial y hamacas, una zona de playa. 

Otro de los atractivos del Dom Hamburgo son las casetas adornadas con el típico toque alemán, donde puedes encontrar todo tipo de delicatessen de la zona. Podrás sentarte en una enorme mesa comunitaria y probar todo tipo de salchichas y carnes que se elaboran al momento. La música tampoco falta ya que hay casetas preparadas para que tanto grupos como DJ toquen sus mejores composiciones.

Información práctica

La entrada al recinto del Dom de Hamburgo es gratuita pero se debe pagar para subir a las atracciones, ver algunos espectáculos y comprar dulces o comida y bebidas. Por ello, si viajas en familia te interesará saber que los miércoles es el día de las familias. Esto quiere decir que recibiréis descuentos en todas los puestos. 

Al ser un recinto muy grande, tiene varios puntos de entrada. Si vas en transporte público, el metro (U-Bahn) te deja cerca si te bajas en Messehallen (línea 2) o en Feldstraße o St.Pauli (línea 3). 

También puedes coger el tren (S-Bahn). Las líneas 1 y 3, con parada en Landungsbrücken y Reeperbahn te dejan al lado. Y en autobús, puedes coger la línea 112 (parada St. Pauli). Ir en coche tampoco es una mala opción. Al lado del recinto está el hotel NH Collection Hamburg City, donde además de alojarte, podrás usar su aparcamiento para dejar tu coche mientras visitas el Dom de Hamburgo.

Autor: Ricardo Carvalho

Guest Relation Manager en el NH Collection Hamburg City

En Hamburgo decimos “Moin”. Mi nombre es Ricardo Carvalho y soy un “Hamburg Jung” (chico de Hamburgo) con raíces portuguesas. Nací aquí y vivo en Hamburgo, una ciudad que amo profundamente.
Para compartir mi entusiasmo por la ciudad, comencé mi formación como especialista en hotelería en el NH Hamburg Altona en 2007, y luego me trasladé al NH Collection Hamburg City en 2015.
La filosofía de la marca NH Collection, junto con el servicio especial que ofrece Guest Relations, me ha brindado el trabajo perfecto. Siempre estoy feliz de mostrar a mis huéspedes la ciudad más hermosa del mundo y de hacer que su visita a Hamburgo sea inolvidable.

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